lunes, 7 de septiembre de 2015

VIVENCIAS


GRATITUD Y CELEBRACIÓN POR EXISTIR


Una de las frases emblemáticas que poetas y artistas usan sintetiza lo siguiente: "Es bueno dar gracias a la vida por todo lo que nos da". Se puede afirmar que la gratitud es sinónimo de felicidad la cual debe cultivarse día a día. Así como el trabajo dignifica, la "gratitud" roba la mejor de tus sonrisas. Embellece el alma. Sólo así comprendes cuando el compositor retumba el eco universal de nuestras conciencias con el "gracias a la vida que me ha dado tanto..."

Por consiguiente, debo dar gracias infinitas a mi familia. Durante el fin de semana compartimos momentos inolvidables. Celebrar el paso de mamá al estado de "celestial" nos permitió llorar. Cómo pasa el tiempo. Cinco años han transcurrido desde aquella noche en que faltando tres horas para llegar el día de mi cumpleaños, decidiste alzar el vuelo  que no tiene retorno físico, pero que te sella como ciudadano en esa ciudad infinita donde el Sol de justicia brilla por los siglos de los siglos. 

Estoy unido a ti Madre desde que fui concebido. Y hoy más que nunca vivo en ti así como tu vives en mi. "Tu muerte, es vida para mi Gladys Luzmila Balladares". ¡Dios, cuan purificador es este proceso!
Gracias Dios por mis hermanos y hermanas. Por mis hijos y sobrinos. Gracias Dios por que me regalas la bendición de compartir triunfos y fracasos con aquella "Mujer Divina" quien llega a mi vida como un sol trayendo esa mezcla de felicidad y alegría proyectada en la mejor de sus atenciones. A ti "la más bella flor de primavera" logras transformar mágicamente los colores grises de mi jardín con los tonos alegres que matizan amor, comprensión, ternura y fortaleza. Gracias a ti y a tu querida madrecita por el compartir que completó el protocolo del honomástico.

Gracias a los amigos quienes con llamadas y a través de las plataformas digitales presentaron saludos y oraciones por motivo de mi cumpleaños. A uds, reitero mi incondicional actitud de servicio. Los mensajes emitidos desde Colombia, Canadá, EEUU, España, Italia, Brasil, Argentina, describen que ha pesar de estar separados por la distancia, estamos unidos por la fe en ese Dios que me permitió conocerlos en un tiempo y espacio de mi existencia. A los amigos de Quito, Cuenca, Portoviejo, Machala, Guayaquil y naturalmente de este Milagro, reitero mi gratitud infinita. 

Y para seguir motivado por la gratitud, debo cortar este escrito pues sencillamente hoy mi padre está cumpliendo 75 años de vida. Ahora amable lector comprenderá las razones de tanta alegría al comenzar esta semana laboral. Año tras año celebro el triduo pascual de mi existencia. Y acepto el vino que la vida me ha dado. De lo agridulce a lo dulce, de la muerte a la vida. Del llanto a la alegría. Simplemente soy un grato a los ojos de Dios.  ¡Gracias totales!

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